lunes, 4 de mayo de 2020

Historia del Silabario en Chile (Siglos XVI- XIX). CAPÍTULO QUINTO.

CAPÍTULO QUINTO.

Don ENRIQUE MARÍA DE SANTA OLALLA, maestro español, que perma neció en Chile desde 1850 exclusivamente consagrado a la enseñanza con infatigable labo-riosidad, publicó un “Tesoro de Fábulas Españolas” en 1864, que comprende los mejores trabajos de Samaniego, Mora, Hartzanbish, Campoamor, Selgas, Martínez de la Rosa y mu-chos otros. En 1859 editó un “MÉTODO FILOSÓFICO DE LECTURA GRADUAL”, en el cual prescribe, “se enseña a escribir i pronunciar a la vez”, esto es, la escritura como base de la lectura, y el silabeo absoluto o cortado “para acostumbrar al niño a mirarla como un signo enteramente inútil”. Después las vocales reuniéndolas en diptongos y triptongos. En seguida las consonantes T, LL, B, D, que el autor llama de “palos altos”. “Se hará notar a los niños que la T (sin travesaño) no es otra cosa que la prolongación de la I; que la L es a su vez una prolongación de la T; que la LL es la repetición de la L; y que la D y la B no son otra cosa que la reunión de la O y la L”.Con ellas se forman articulaciones simples, palabras de varias sílabas i ejercicios de lectura corriente”. A continuación, los signos que denomina de “palos bajos” J,P, Y, G, Q, F.-“ No hay inconveniente en presentar la J como signo primitivo, i demostrar sucesivamente que la P i la Y son combinaciones de la I con la J; que la G i la Q son formadas por la O i la J; notando que en la Q el trazo final no vuelve hacia la izquierda, sino hacia la derecha; finalmente ,que la F no es otra cosa que un do-ble signo empezando con la L i concluyendo con la J”.

Nuevos ejercicios de articulaciones, sílabas, palabras yn frases. Srguidamente, mlas consonantes de “palos cortos”: M, N, Ñ, RR, R, V. “ son repeticiones de la I, ora al dere-cho, ora al revés”. Por último, las consonantes de trazos curvos: S, Z, C, CH. “estas exigen más ejercicios, dejando a la prudencia de los señores preceptores la estensión de las espli-cacioones, que es el método más racional i por consiguiente, más eficaz”. Esta serie, como las precedentes, termina con ejercicios de combinaciones, silabeos y fraseología.

En las lecciones mencionadas no está comprendida la X, pero más adelante se ha-llará una lección especial para el uso de este nexo, con el objeto de que el alumno conozca su doble valor, y no confunda este signo con las letras simples compuestas.

Como se ve, el autor se esfuerza por seguir un orden genético, “teniendo que armo-nizar la escritura con la lectura, me he visto precisado a fundar el sistema de enseñanza en las semejanzas de formas i no en la de sonidos”. Más, recomienda “que el institutor tenga cuidado especial de que el alumnos no confunda el sonido de la V con el de la B, el de la LL con el de la Y, ni el de la Z o C, sino que el mismo preceptor pronunciará con claridad dichas letras, i las hará repetir a sus alumnos hasta que estos las pronuncien con la propiedad debida”.

Respecto de las mayúsculas, el autor se expresa como sigue; “También notarán que no empleamos en las primeras lecciones las letras mayúsculas, pero esto es fácil de com-prender, pues solamente a los que desconocen las facultades de una escritura pequeña, les ocurre el enseñar a la vez dos abecedarios, antes de que comprendan la relación que tienen entre sí letras de uno solo, para formar sílabas y palabras”.

El silabario de Santa Olalla es, pues, uno de los más lógicamente concebidos y sig-nificó en su tiempo, un considerable progreso, que el profesorado no supo aprovechar.

Santa Olalla trabajó también por difundir la lectura autobiográfica o manuscrita, des terrada de las escuelas con la “lectura de cartas”. Con fecha 1° de junio de 1857, empezó a publicar en Valparaíso un periódico semanal que llevaba el título de “Enciclopedia de la Infancia o Curso Completo de Instrucción Primaria i Secundaria”. Esta publicación conte-nía materias de Religión, Historia, Geografía Universal, Física y Quimica, Historia Natu-ral; literatura, Agricultura Viajes, Industria, Comercio, etc. Incluía grabados de personajes (el lechero, el minero, el heladero, el policía, el arriero, etc.)

En el diario EL MERCURIO de fecha 24 de marzo de 1857, se publica la siguiente noticia: “COLEGIO ESPAÑOL DE SEÑORITAS.- Este establecimiento que no cuenta aun seis meses de establecido, ha dado en sus primeros exámenes, que tuvieron lugar en los últimos tres días de la semana pasada, una prueba sorprendente del interés i empeño que se toman sus dignas profesoras por el progreso de sus educandas. Las señoritas de Santa Olalla, directoras de este colegio, han comprendido perfectamente todo el partido que podía secarse a la precocidad del talento americano i han salido airosas de la primera prueba”.

Don GUILLERMO ANTONIO MORENO, (1829-1876), pedagogo de ins-pirada vocación, fue Director activo y laborioso de la Escuela Normal de Preceptores de Santiago durante 12 años. Era de palabra fácil y circunspecta, ánimo siempre tranquilo, celoso y disciplinario. Suyas son las obras intituladas: “COMPENDIO DE GEOGRAFÍA ANTIGUA”, “CURSO ELEMENTAL DE AGRICULTURA”. Hábil traductor, publicó también “MANUAL DE PEDAGOGÍA” e “HISTORIA ANATIGUA, GRIEGA Y ROMANA”.

Preconizó las ventajas del silabeo absoluto, sentando el principio de “no pronunciar jamás las consonantes solas, sino unidas siempre con una vocal que se encuentra en la sílaba”. Tradujo un artículo sobre el procedimiento fonético (creado en Francia en 1827 por M. Laffore), mostrando sus ventajas de simplicidad, lógica y presteza.

Finalmente, concluía un “NUEVO MÉTODO GRADUAL DE LECTURA”(1864) y solicitaba la aprobación de la Facultad de Filosofía y Humanidades. Lo informó don Marcial González, exponiendo que se trataba de un silabario para la enseñanza simultánea de la escritura y la lectura, sin los nombres de las consonantes, de conformidad a un procedimiento nuevo.

Es útil recordar lo ocurrido al respecto. La Facultad, en sesión de 5 de noviembre de 1866,a la que concurrieron don Guillermo Matta, don Domingo Santa María, don Mi-guel Luis Amunátegui don Diego Barros Arana ,don Justo Florian Lobeck y don Domingo Arteaga Alemparte,tomó en consideración el Informe del señor González. El señor Lobeck manifestó que el procedimiento de enseñar a leer y escribir simultáneamente sin nombrar las consonantes, era el adoptado generalmente en Alemania, por el cual el mismo había aprendido a escribir a a leer a la edad de 5 años. El señor Matta preguntó cómo se deno-minarían las consonantes solas.Lobeck contestó “con un sonido extraño”, pero Matta re-plicó que “el Castellano se opone a ese nuevo género de articulaciones”. El señor Arteaga Alemparte aseguró que los muchachos, después de grandes, se negaban a “bramar y pro-nunciaban las letras por sus nombres”. Se convino en que la vocal les daría el valor co-rrespondiente, según combinación.

Así fue desdeñado con ironías el fonetismo ,incorporado al dominio de la pedago-gía desde el siglo de Bonet y del maestro Morales y practicado por Sarmiento. Pero un día no lejano, habría de traspasad triunfante los umbrales de la escuela chilena.

Aprobado el texto, la Facultad lo envío con sus antecedentes al Consejo Universita-rio,el cual, en su sesión de 29 de septiembre de 1866,después de oir al autor, celebró los dos acuerdos transcritos en seguida:

I.-Confirmar el acuerdo de la F.de H. de fecha 5 de noviembre de 1866, por el cual, en su sesión se aprobó el NUEVO MÉTODO GRADUAL DE LECTURA”,trabajado por don Guillermo Antonio Moreno, declarándolo superior a los otros textos de su clase cono- cidos en Chile.

II.-Oficiar al señor Ministro de Instrucción Pública para que, si lo tiene a bien, se sirva mandar a ensayar este nuevo método de enseñar a leer, en varias escuelas de San-tiago bajo la dirección del autor y la inspección de una comisión de la F. de H.”

El Ministerio, según dióse cuenta en sesión del Consejo de 2 de marzo de 1867, de-signó cuatro escuelas de niños y cuatro de niñas para verificar el ensayo, indicad ,pero parece que éste no tuvo lugar.
El “NUEVO MÉTODO”, quedó inédito.

Los textos de lectura “rudimental”, publicados hasta entonces, ni superaron la trama silábica de los de Sarmiento, Argüelles, Ahumada Moreno, ni consultaron las indicaciones metodológicas de Vico, Santa Olalla, Moreno ni Ortiz.

(“RESEÑA HISTÓRICA DE LA ENSEÑANZA DE LA LECTURA EN CHILE”
SIGLO XVI-XIX.-MANUEL ANTONIO PONCE (1852-1905).

El profesor y escritor, PEDRO PABLO ORTÍZ (1822-1904), había nacido en San Fernando, y se desempeñó como Visitador de Escuelas Municipales de Valparaíso, desde 1852 ,hasta el día en que debió viajar a EEUU. como corresponsal del diario EL MERCURIO En ese país sirvió los cargos de Secretario de la Legación de Chile; de Encargado de Negocios en Méjico y de delegado de la Facultad de Filosofía y Humanidades de la Universidad de Chile, dedicando gran parte de su tiempo al estudio pedagógicos ;visitar escuelas; conferen-cias a los profesores y a dialogar con grandes maestros. Fruto de eso es su notable obra pu-blicada en Nueva York en 1866,”Principios fundamentales sobre educación popular i los nuevos métodos de enseñanza”, donde propone sustituir la síntesis por el análisis en la enseñanza de la lectura rudimental. Este método es de escritura y lectura simultáneas, em-pleando letras móviles y considerando el silabeo sólo como ejercicio de pronunciación. De las letras pasa a las palabras de una sílaba y de significado sencillo, pasando enseguida a las compuestas y más complicadas. Se usaban tarjetas con el alfabeto impreso, escrito en las pizarras. El profesor Ortiz escribió además unos Principios Elementales de Física (1860). Regresó a Chile en 1867, dedicándose al periodismo, y a la enseñanza.

Don CARLOS GONZÁLEZ UGALDE (1838-1899), profesor y periodista, publicó en 1867 “Poemas de la Infancia”. Dividida en tres partes: 1°- Estructura silábica del ver-so; 2°.-Clasificación de las estrofas y 3°. La rima.

El Intendente de Santiago, Francisco Echaurren Huidobro, por Decreto de 18 de abril de 1868, creó una Junta Visitadora de Escuelas, entre cuyos fines estaba el vigilar la correcta enseñanza de la lectura. Un informe de la época dice: “El aprendizaje del silaba-rio, según nuestra opinión, es el ramo más importante de los que se cursan en una es-cuela; cada alumno que aprende el silabario es un hombre que se arranca a la ignoran-cia para hacerlo entrar en el camino de la civilización. Por esta razón, cualquiera medi-da ,por dispendiosa que sea ,si da por resultado el abreviar este estudio, será siempre suficientemente compensada”.

El 6 de septiembre de 1868, en una reunión de Preceptores de Santiago, el profesor Pedro Pablo Ortiz, leyó “La educación de la infancia o los nuevos métodos de enseñar el silabario i los primeros conocimientos de las letras”. Recomienda las lecciones objetivas y sencillas como iniciación del lenguaje hablado en su fase familiar; el uso de las letras móvi-les para la enseñanza del alfabeto y de las primeras combinaciones articulativas; la lectura de frases o sentencias completas sobre cosas familiares por observación propia; el silabeo como ejercicio de pronunciación y ortografía.

El “NUEVO MÉTODO DE LECTURA GRADUAL”, (1864-La Serena,),escrito por don ENRIQUE BLONDEL, francés, dedicado a la enseñanza por espacio de 40 años como preceptor en Ovalle y profesor de idioma y de teneduría de libros en el Liceo de La Serena, es de silabeo relativo, de buena graduación articulativa y con frases adecuadas. Consta de 25 lecciones, las cuales, por lo general, empiezan con una “nota para el maes-tro”, o sea, “algunas advertencias metodológicas”. Blondel es también autor de una “Te-neduría de libros simplificada” (La Serena, 1866); de un “Método teórico-práctico de lengua francesa”, y de numerosas colaboraciones en la prensa de La Serena.

El “NUEVO MÉTODO DE LECTURA JEOGRÁFICO” (1868) que contiene el libro primero para aprender a leer (1868, publicado por el Preceptor don PEDRO ÁN-JEL BARRENECHEA, es también de silabeo relativo, según la clave alfabética de Sar-miento. Su desarrollo es análogo al de sus congéneres. Como ejercicios de lectura ofrece algunas breves nociones de la geografía de América, de ahí el calificativo de geográfico que le da su autor. La Junta Visitadora de Escuelas, en sesión de 3 de marzo y 26 de octu-bre de 1869, designó una Comisión de su seno para examinar los Silabarios de los señores Barrenechea y Guzmán Meneses. Suscribieron el Informe los señores Pedro Pablo Ortiz y Luis M.Rodríguez, concretándose al Silabario del Señor Barrenechea, dicen:”No hace más que seguir la clasificación ordinaria de las letras o sílabas, poniendo al lado de ellas, palabras mal elegidas y que no tienen significado alguno para el niño. Como Silabario, no posee otro distintivo que su división en lecciones cortas y calculadas para la enseñanza mutua. En cuanto a lo jeográfico, es decir, de introducir en la lectura nombres de lugares o pueblos, en vez de la materia común, nosotros consideramos más bien como un grave de-fecto en lugar de ser una ventaja. Si por jeografía se entendiera la simple nomenclatura de ríos, montañas, reinos, etc., Ya podría estimarse en algo esta pretendida novedad. Más, lejos de ser así, el efecto que produce es el de desnaturalizar esta ciencia y familiarizarla al alumno con la vulgar idea de que sabiendo muchas palabras del diccionario jeográfico, ya se sabe jeografía, por más que no tenga ni la más remota idea de lo que significan ni del objeto con que se le encomiendan estos nombres a su memoria.

Si por esta circunstancia se denomina jeográfico al Silabario del señor Barrene-chea, por la misma razón se podría llamar epistolar al del señor Guzmán Meneses, pues toda su novedad estriba en proporcionar una lectura de cartas sencillas y no mal combi-nadas. Pero es justo reconocer, que no ofrece mérito alguno que lo coloque sobre los de sus predecesores. Hay mucho que lo hace desmerecer a su lado.”

Don MANUEL CARRASCO ALBANO (1834-1873), editó en 1868, “CURSO GRADUAL DE LECTURA PARA LAS ESCUELAS DE LA REPÚBLICA.-EL MAESTRO”.

Fue reeditado (203 páginas) en 1871, por la IMPRENTA NACIONAL de Santiago. Además publicó en 1874, el texto “COMENTARIOS SOBRE LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE 1833”.

Anteriormente había publicado en1855 el texto “Lectura Popular” ,traducido del inglés, de una colección publicada en Estados Unidos y adaptado en Chile .También había editado un “CURSO GRADUAL DE LECTURA” dividido en .dos textos de lectura, uno con el título de “EL AMIGO DE LOS NIÑITOS” (1857), el cual estaba dirigido a dar lecciones de orientación moral por medio de lecturas seleccionadas, y el otro titulado “EL MAESTRO”, (1858) cuyo contenido era referente a diversos temas como Geografía, Historia, Ciencias Naturales, Tecnología, que tenían el propósito de entregar conocimientos que despertasen su inteligencia e interés por el saber.

Había nacido en 1834. Su padre fue don Juan Manuel Carrasco Valenzuela y su ma-dre Nicolasa Albano Vergara. Estudió en el Colegio de Santiago y después en el Instituto Nacional. En 1852 recibió su diploma de Bachiller en Humanidades. Más tarde, en abril de 1855, recibió el título de Abogado. Fue elegido miembro de la Facultad de Filosofía y Hu-manidades, sucediendo a don José Joaquín Vallejos. Carrasco Albano perdió la razón en 1861, arrastrando desde entonces una penosa existencia. En ocasiones tenía intervalos de lucidez, falleciendo finalmente en Masachussetts,Estados Unidos, luga ral que había sido enviado por su familia en procura de mejoría.

Don VICENTE GARCÍA AGUILERA (1834-1900), abrazó muy joven el magiste-rio desempeñándose como Director de la Escuela Modelo de Recoleta, Municipalidad de Santiago (1856).Fue designado Visitador de General de Escuelas de la Provincia de Ata-cama, cargo que desempeñó hasta el m omento en que fue llamado por el gobierno de San Juan (Argentina) para encargarse de la Dirección de Educación primaria de aquella provin-cia..Fundó la escuela Domingo Faustino Sarmiento. Fue nombrado Inspector General. De-signado Director de Instrucción Pública del Gobierno de Catamarca (Argentina).En junio de 1862 fue nombrado Visitador de Escuelas de la Provincia de Arauco. El 23 de noviem-bre de 1863, se le traslada en el mismo cargo a la Provincia de Atacama donde permaneció hasta abril de 1866,cuando renunció por motivos de salud... Editó en 1857, una Colección denominada “EL LIBRO DE LAS ESCUELAS”, reeditándola ampliada, en 1865 con ejerci-cios de dictado, composición, recitación y declamación .También publicó “Estudios Histó-ricos i Prolegómenos de Jeografía Descriptiva” (1859). En 1875 publicó “ALFABETOLO-JÍA CASTELLANA O MÉTODO INDIVIDUAL ANALÍTICO DE LECTURA GRA-DUAL” (2ª.edición.Córdova).

Posteriormente, en 1882, redactó un silabario, llamado “EL NUEVO SARMIENTO O MÉTODO GRADUAL DE LECTURA I ESCRITURA SIMULTÁNEA”, (47 pp.), el que fue publicado en la República Argentina y reimpreso en Chile en 1886, bajo la dirección de don José Bernardo Suárez.El texto tiene como base el lema mirar, pensar, hablar, escribir, leer. Su temática es la combinación de la escritura y lectura, pero mal aplicada, porque primero enseña a leer. No tuvo mayor aceptación en las escuelas.

El “NUEVO MÉTODO DE LECTURA” (1869), escrito por don FRANCISCO GUZMÁN MENESES, oficial de Número del Ministerio de Instrucción Pública, obe-dece al mismo principio silábico, enseñando los diptongos y triptongos inmediatamente después de las vocales. A la izquierda de cada página, dividida por una línea vertical, hay sílabas sueltas, a la derecha, frases, a veces son caracteres manuscritos, el resto es suma-mente rápido, y, por lo tanto, deficiente en su estructura silábica. La novedad de este Sila-bario, radica en que está redactado en forma de cartas sencillas y muy bien combinadas, además es breve y rápido en el desarrollo de su plan. Como tal no pretende ser más que lo que su título indica: un Silabario, en su más simple expresión.

El “SILABARIO ARREGLADO AL SISTEMA SIMULTÁNEO DE ENSEÑAN-ZA”,(1870),escrito por el Director de la Escuela “Andrés Bello”, JOSÉ MERCEDES MESÍAS (1833-1899), presenta las letras en grupos, según el orden potencial y las síla-bas, según la graduación clásica de Sarmiento y Argüelles, pero contiene solo sílabas y pa-labras sin frases ni sentencias que transmitan ideas a la mente infantil.

En sesión de 2 de noviembre, la misma comisión nombrada anteriormente, (J.A. Núñez; Eduardo Matte; Liborio Brieva) informó que “el Silabario del señor Mesías, reúne en sí ventajas muy considerables que lo constituyen preferible a cuantos se han adoptado hasta ahora como textos de enseñanza. A la brevedad i precisión de sus ejercicios, se agre-ga mucha exactitud y lógico encadenamiento en el desarrollo de su plan”.

No coinciden los informantes con el señor Mesías, quien dice que “ un silabario de-be abrazar únicamente el silabeo i formación de las palabras i nunca oraciones o pensa-mientos, que es muy oportuno intercalar en un silabario frases breves i al alcance de los niños, para realizar el sabio principio de la pedagogía moderna, que prescribe no enseñar una letra ,una sílaba que no represente una idea comprensible para el alumno por más pe-queño que éste sea.. Por otra parte, el niño tropezaría con graves dificultades si se le obli-gase, bruscamente a leer de corrido, después de haberse acostumbrado a la lectura de pa-labras aisladas e inconexas.”.